Aprender magia de los mejores magos del mundo
Aprender magia. Magia de cerca. Hoy hablaremos de uno de los magos que mejor dominaban la magia de cerca, Slydini.
Cuando hablamos de magia de cerca, los que entendemos del tema, pensamos en el tipo de magia mas difícil. ¿Por qué? Porque hay que ser muy bueno, porque no se tiene que ver la trampa. Porque se distingue un buen mago de un mal mago, como a todo, en las distancias cortas. Cuando buscas a un mago para eventos, fiesta de empresa, coctel etc., buscas sorpresa, impacto y diversión. Nada como la magia de cerca para dártelo, y nadie como nosotros para proporcionártela.
La espectacular magia de cerca de Slydini.
Magia muy de cerca, sin artilugios, con elementos del día a día, bolas de papel, monedas, cigarros, los míticos pañuelos que se atan y se desatan en las manos de un espectador. Inolvidable su forma de atraer y controlar nuestra atención por donde el quería, un ejemplo estas bolas de papel por encima de la cabeza del espectador o esa rutina de modas que iban de un lado para otro, una autentica locura.
Su nombre, Quintino Marucci. No se sabe cuándo nació, pero se aproxima a principios de 1900 en un pueblo italiano.
Su padre era mago aficionado, de ahí le vino la curiosidad por este noble arte. Siendo muy pequeño se fue a vivir a Argentina con su tío y ahí empezó su carrera como mago.
En 1930 se fue a E.E.U.U., le costo por el idioma, pero al final pudo hacerse su público. Se cuenta que en Nueva Orleans en el año 1945 el publico de una convención de magos le ovaciono durante 20 minutos sin parar de aplaudir. Ahí la comunidad mágica empezó a tenerlo en cuenta como un reformista de la magia.
Su escuela de magia.
Como muchos otros magos actuó para los soldados en la segunda guerra mundial y en 1947 se traslado para tener su residencia fija en New York donde monto su escuela de magia. Te pilla lejos para apuntarte, pero te recomiendo una, The Magic Factory.
Durante el resto de su vida se dedico a la enseñanza y a seguir actuando para público y magos, recorriendo todo el mundo y dejando un grato recuerdo a todo aquel que disfruto de su talento, elegancia, y ese acento inglés con un toque italiano tan característico. Todo un maestro que se fue en el año 1991 y que por lo menos yo, nunca sabremos con qué edad.
